¿4.5 millones para nada? El senador Enríquez y su costosa ineficiencia

5/7/20251 min read

Durante los últimos tres años, el senador José Ramón Enríquez Herrera recibió más de 4.5 millones de pesos en sueldo y prestaciones como representante de Durango en la Cámara Alta. ¿El resultado? Cero iniciativas aprobadas, decenas rechazadas, y millones gastados en un cargo que dejó más dudas que aportes.

De acuerdo con registros del Senado, Enríquez presentó 51 iniciativas durante su gestión legislativa. De esas, 24 fueron rechazadas, 27 quedaron congeladas en comisiones, y ninguna fue aprobada. Un desempeño legislativo que, contrastado con su salario mensual de más de 125 mil pesos, revela una realidad preocupante: el senador cobró sin resultados.

La cifra total que recibió, 4.5 millones de pesos, equivale a 375 becas anuales para estudiantes universitarios, o al financiamiento de más de 60 tratamientos médicos para niños con cáncer. Incluso permitiría equipar dos clínicas rurales completas o construir una decena de aulas nuevas en zonas marginadas de Durango.

Pero eso no es todo. El contraste con la realidad de miles de jóvenes duranguenses hace aún más evidente el desbalance. Un joven que trabaja como mesero, repartidor o auxiliar de tienda gana alrededor de 6 mil pesos al mes. Para alcanzar lo que Enríquez cobró en tres años, tendría que trabajar más de 62 años seguidos. Una vida laboral entera… para igualar un sueldo sin resultados legislativos.

José Ramón Enríquez no solo fue senador: también aspiró —sin éxito— a la gubernatura, a la alcaldía y ahora nuevamente busca un cargo público. Para muchos, su carrera ha estado marcada por el oportunismo político, la falta de resultados tangibles y un historial de privilegios financiados por los ciudadanos.

“Durango merece algo mejor”, concluye una reciente pieza crítica que circula en redes. Y la pregunta sigue en el aire: ¿qué clase de representante cobra millones y no entrega nada?